La capacidad de energía excedente se trae abajo la eficiencia operativa e infla los gastos operativos. Además, hay dos motivos principales por los que existe: un proceso de especificación por debajo de lo óptimo y el deseo humano natural de una manta protectora.
Como líder en infraestructura de centros de datos, sé que es común que los profesionales de Vertiv visiten grandes organizaciones respetadas cuya utilización del sistema energético se encuentra por debajo del 20%. Está claro que aún se puede mejorar y que las mejoras pueden traer ahorros importantes en términos de gastos operativos.
Hace poco participé en una serie de clases magistrales de consultores e hice una encuesta improvisada. Solamente 1 participante en un salón lleno indicó que su objetivo era llegar al 100% o más del límite. Cuando le pregunté a las personas por qué no apuntaban al 100% o más, hubo una combinación entre no querer operar a la capacidad de potencia del equipo y el enfoque conservador de sus clientes.
Para las coubicaciones, esto puede representar la pérdida de oportunidades de ingresos. Si podemos ayudarles a recuperar, por ejemplo, 360 kW de capacidad en una ubicación privilegiada, ¿cuál sería el valor de esto? No es tan difícil de averiguar. Si dicha capacidad se puede vender por $1000 por kW (para hacer las matemáticas fáciles), esto resulta en $360.000. Sin duda, merece su tiempo y esfuerzo para analizarlo.
Los centros de datos más previsores, en especial los más grandes, presentan cada vez mayor interés en lograr este ahorro.
Existen dos formas de cambiar la ecuación de bajo consumo energético:
- De abajo hacia arriba agregando carga de TI. Hemos visto algunas coubicaciones vender más capacidad de lo que planificaron originalmente para aumentar el consumo energético.
- De arriba hacia abajo, adecuando el tamaño de la infraestructura de energía. Como proveedores de infraestructura, la mayor oportunidad que podemos ofrecer es el redimensionamiento de la infraestructura de energía desde la interfaz de usuario.
A continuación, encontrará tres ideas principales para la estructura de energía redimensionada que ofrecerá el mayor retorno de inversión:
- Dimensione su transmisor de potencia de forma correcta: optimice las capacidades del UPS
Las empresas adquirientes tienen buenas intenciones, pero tienden a estar de acuerdo con una práctica común que perjudica la utilización: comprar con base en el menor denominador vs. con base en los tamaños óptimos de kW. Por ejemplo, especificar un sistema de UPS de 800 kW cuesta menos kW por adelantado que un sistema de 750 kW. Puesto que los disyuntores del equipo son los mismos entre el sistema de 750 y el de 800 kW, si se selecciona uno de 750 kW, están dejando 50 kW en la mesa y aumentando el costo de su sistema por kW.
Los clientes están evaluando cada vez más el costo con base en el costo por kW. No me da pena decirles a los clientes cuando están infrautilizando la capacidad y aumentando su costo por kW.
El UPS es solamente el elemento más obvio, pero existen oportunidades para rescatar la capacidad infrautilizada en cada paso en la cadena energética. Combinar capacidades a lo largo de la cadena (la tarjeta de entrada, la tarjeta de salida, el conmutador de transferencia estática, UPS) resulta en la utilización máxima. Cualquier otra cosa infrautiliza la capacidad.
Si puede tomar este paso, puede ahorrar hasta un 7 u 8% en costos operativos del sistema de energía. - Colapso del mito del buffer: llegue al 100% de la utilización del límite
La mayoría de los límites de UPS se configuran en menos del 100% para “no exceder la capacidad”. Vertiv insta a utilizar nuestros UPS al 100% y en algunos casos, el UPS está especificado en más de esto según la temperatura.
¿Entonces por qué no utilizar esta capacidad?
Existen compañías de clase mundial que dependen enormemente de la TI. Estas establecen los límites de su UPS al 100% o más. Y es posible que cada vez más vayan en esa dirección con base en las conversaciones que estamos teniendo.
Establecer los límites en menos del 100% tenía sentido hace cinco o diez años, cuando controlar la carga de TI a un máximo de 80% de la capacidad del UPS era la norma. Las cargas quedaban rezagadas y necesitaban más kVA que kW. Sin embargo, este ya no es el caso en nuestro mundo libre de transformadores, al quitar un grado de variabilidad de la ecuación. El sistema de energía es más preciso y se puede operar más cerca de la potencial nominal del UPS en vez de los kVA.
Existen muchas razones por las cuales las organizaciones evitan pasar sus límites al 100%. Estas carecen de consumo de datos en tiempo real, una capacidad completa de carga inconsistente de los proveedores y el miedo a la sobresubscripción. Sin embargo, si puede alinear las estrellas, esto puede reducir costos entre un 5 y 10%. - Reduzca los tiempos de operación de las baterías
La mayoría de las organizaciones cuentan con al menos 5 minutos de tiempo de operación de la batería y esto se debe en gran parte a que los fabricantes de las baterías VRLA históricamente no ofrecen garantías en baterías con menos tiempos de operación.
Esto está cambiando con una mayor adopción de las tecnologías de baterías de iones de litio y fuentes de respaldo alternativas de energía inteligente. Lo realmente necesario es el tiempo de operación que necesitan los generadores para activarse y soportar la carga. Si su equipo de operaciones puede realizar una prueba de 2 minutos de forma repetitiva, 2 minutos es lo que se debe indicar.
Si se reduce la capacidad de la energía a lo que es exactamente necesario para pasar a la energía de respaldo, se puede ahorrar otro 17 a 24% en costos operativos de energía.
Si es así de blanco y negro, ¿por qué no lo están haciendo todos los demás?
Estas son solo tres de las áreas donde se puede lograr el mayor ahorro. Se pueden adoptar otras estrategias como simplificar la paralelización del UPS, minimizar o eliminar los PDU redundantes y convertir un UPS de entrada dual a uno de entrada única. Cuando se toma un enfoque integral, el ahorro total en costos operativos podría llegar hasta 50% por encima de un sistema no optimizado.
Sin embargo, incluso si adopta solo estos tres pasos, se puede ahorrar más de un tercio del costo operativo de su sistema de energía y liberar suficiente capacidad. Entonces, ¿por qué nadie lo está haciendo?
Hay una razón simple: se necesita valor. Es más fácil y más cómodo permitir que haya bastante libertad para adoptar medidas. Pero con márgenes tan estrechos, especialmente en las coubicaciones, y las múltiples formas de alcanzar cinco nueves de disponibilidad, el rescate de la capacidad se vuelve una prioridad. Estaremos encantados ayudarle a explorar formas tanto para reducir sus costos operativos como para mantener los ANS.
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